jueves, 3 de marzo de 2016

JESÚS, EL LIBRE.

"Jesús fue verdaderamente libre. Su libertad estaba arraigada en su conciencia espiritual de que era el hijo amado de Dios, Sabía, en lo profundo de su ser, que pertenecía a Dios antes de nacer, que había sido enviado para proclamar el amor de Dios y que retornaría a Dios después de haber cumplido su misión. Esto le dio la libertad de hablar y obrar sin tener que complacer al mundo y el poder de responder al sufrimiento de las gentes con el amor de Dios, que sana.
Por eso dice el Evangelio : 'Toda la multitud buscaba tocarlo, porque de él salía una virtud que sanaba a todos (Lucas 6, 19)."

HENRI NOUWEN


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.